Más conceptos sobre formas de orientación y navegación terrestre que todo trekker, montañista, compamentista o explorador debe conocer…
Gabriel Esquivel Director de NORTHLATITUDE
Formas de Orientación y Navegación
En lo que respecta a la «Orientación» y a la «Navegación terrestre» como técnicas, ambas pueden aplicarse no solo por medio de los métodos artificial y natural, sino que en forma diurna como nocturna, es decir, se pueden llevar a cabo durante el día o la noche para hacer una travesía en un terreno natural determinado.
Por ejemplo, un método existente y aplicable para orientarse en forma diurna y natural es aquel que procede de la observación empírica que realicemos de las distintas posiciones que ocupa el sol en su desplazamiento y trayectoria en el cielo, utilizando en tierra un pequeño tronco o palo clavado en el terreno en que nos encontremos.
Sabiendo aplicar ese método para conocer los puntos cardinales, siempre con respecto a nuestra ubicación física en el terreno como en cualquier otro lugar de la superficie terrestre, podemos estar en situación de establecer el eje Este-Oeste, que trazando una línea perpendicular en forma imaginaria o real sobre el terreno, conoceremos el eje demarcado por la línea Norte-Sur, brindándonos esto una solución acerca de la ubicación de los puntos mencionados.
No solo para realizar una travesía en montaña, correr una carrera de aventuras o realizar un trekking en zona boscosa, entre otros lugares, uno debe saber orientarse para posteriormente poder hacer la navegación terrestre acorde, sino que, ante una emergencia ocurrida y que por sus características se deba hacer supervivencia, una persona un grupo de ellas, sabiendo aplicar este método, estará también en condiciones de determinar los puntos cardinales y por ende, conocer en que dirección dirigirse por propia elección, para buscar ayuda.
Por ejemplo, si un equipo de corredores de carreras de aventuras se halla realizando una navegación terrestre en horas nocturnas en un circuito perteneciente a una zona montañosa y se pierden por no saber leer e interpretar bien la información de su carta de navegación por razones de tener poca experiencia junto a la práctica combinada del uso de una brújula y la lectura de la carta topográfica (métodos de navegación artificial), trayendo además aparejado el propio cansancio físico y psicológico de varias horas de actividad y aparte, sumada la escasa experiencia en navegar en un terreno de montaña, una de las posibilidades de poder orientarse en el lugar es mediante la ubicación espacial de los puntos cardinales durante esas horas nocturnas.
Ahora, cabe preguntarse, orientarse de noche con que fin? Bien, si este equipo se pierde y tiene problemas para orientarse con ambos elementos instrumentales de navegación artificial y no sabe como ubicar bien los puntos cardinales (tiene problemas para alinear el norte magnético de la brújula y el norte de la cuadrícula o coordenadas de la carta, algo que es fundamental para un orientador) y debe si o si ubicar algún punto cardinal como el este la salida del sol- por ejemplo, en este caso se debería mirar al cielo para buscar e identificar una constelación de estrellas válida para orientarse en el hemisferio sur con respecto a los dos hemisferios del planeta tierra (norte y sur), llamada «Cruz del Sur».
Conociendo la distribución geográfica de las estrellas que la componen y haciendo unos simples cálculos, nos indicará aproximadamente la dirección del Polo Sur Geográfico (no confundirla con la falsa Cruz del Sur que es una constelación de estrellas muy próxima a ésta pero que conociendo bien una de la otra, no presta a confusión). Aplicando estos métodos naturales diurnos y nocturnos para ubicar los puntos cardinales durante el día o la noche cuando no se disponga de elementos o experiencia para conocerlos por medio de la utilización de elementos artificiales, se estaría en condiciones de proseguir con la respectiva travesía mediante la navegación diurna o nocturna».
Precauciones y razones a la hora de aplicar un método de Navegación Nocturna
Si una persona se encuentra caminando sola en un terreno de características agreste y hostil como un bosque, en presencia de lugares abiertos y cerrados, se hace de noche y consecuentemente se pierde, lo mas indicado y sensato es que necesite orientarse para salir de ese lugar desconocido, en el caso de no tener o no saber usar bien elementos de orientación representados por una brújula y un simple mapa.
Conociendo el significado de Orientación y Navegación Terrestre, es entendible que esa persona deba desarrollar una «navegación nocturna». De hecho, si de alguna forma sigue desplazándose en el terreno, lo que estaría desarrollando es una simple caminata, por necesidad propia de salir del lugar pero sin tener idea quizás si va en la dirección correcta.
Ante esa situación de encontrarse perdido, se debería realizar la propia navegación nocturna pero siempre siguiendo la dirección del polo sur, a través de la lectura que se haga en el cielo de la ubicación de la Cruz del Sur pero, se debe tener en cuenta que seguir un punto cardinal en este caso por medio del desplazamiento en un bosque no es lo mismo que hacerlo en un terreno llano, ya que este tipo de terreno no posee los obstáculos naturales propios de un lugar cerrado como un bosque por la presencia de árboles, lo que nos permitirá hacer una buena observación de las estrellas por tener el cielo totalmente abierto y seguir adelante.
Con respeto a este último ejemplo que expongo, existen otras situaciones en la cual no se debería «navegar durante la noche» en un terreno desconocido. Porqué? porque salvo que se atraviese una situación de supervivencia o se compita en algún evento deportivo ya establecido por sus organizadores, navegar de noche por un lugar que no se conoce, significaría entrar en la escena de la combinación de los peligros objetivos (de origen natural como geofísico y meteorológico) y los peligros subjetivos (inherentes al rol del hombre, factores del orden físico, psíquico y moral).
Si no se conoce y familiariza con un terreno durante el día, es decir, si no se hace una navegación diurna previa que nos permita conocer y familiarizarnos con las características del terreno y en parte, su clima, sería una acción imprudente que sin esa experiencia previa se haga una navegación nocturna.
La explicación científica acerca de cuando navegar durante la noche es la siguiente: durante las horas de luz, se puede observar el color natural o artificial del terreno, su ubicación y profundidad espacial de objetos naturales y artificiales del lugar respecto a la propia posición que un orientador y navegante terrestre ocupa en el terreno.
Es la mente la que recibe, analiza y toma conclusiones de esa información obtenida respecto a los objetos que observamos (procesamiento de la información). Navegar en un terreno desconocido de noche puede traer aparejadas algunas dificultades debido a que el ojo humano no está apto para percibir el color y la ubicación espacial de los objetos por sortear en poco tiempo, teniendo en cuenta el tipo de actividad que se efectuará (aunq